CON MOTIVO DEL DÍA NACIONAL DE ANDALUCÍA
Durante el período que transcurre entre 1977 y 1980 se sostuvo una lucha continuada en la que la movilización y la concienciación de nuestro pueblo fue capaz de romper el guión que los poderes fácticos habían escrito para nuestra tierra, culminando dicho proceso en el Estatuto de Autonomía de Carmona que, con todas las insuficiencias de una ley promulgada bajo el actual modelo estatal, era sumamente ambicioso y podría haber sido una herramienta útil que hubiera favorecido la lucha de las clases populares andaluzas y del conjunto del pueblo andaluz. No obstante, esa victoria táctica fue arrebatada por un PSOE que, surgido de forma sumamente oscura de las entrañas delfranquismo, supo utilizar todos los resortes de la nueva autonomía no para concienciar a nuestro pueblo y crear y fortalecer poder popular, desarrollando una reforma agraria, reindustrializando nuestra tierra y solucionando sus problemas endémicos de dependencia sino para consolidarse como una auténtica mafia partidista en la que el tráfico de influencias, la corrupción y una tremenda red clientelar ha sumido en la pasividad y la inacción a la inmensa mayoría de los andaluces.
Como consecuencia de todo ello, la realidad política actual se caracteriza por una tremenda dispersión de las fuerzas que dicen luchar por los intereses históricos del pueblo trabajador andaluz. Unas, subsumidas voluntariamente en proyectos ajenos, han sido situadas en un segundo plano, como simples palmeros, por fuerzas que, teledirigidas desde Madrid, piensan más en poltronas y puestos burocráticos antes que en las necesidades de las clases populares andaluzas. Otras, cegadas por el sectarismo y la soberbia, creen, en sus delirios febriles de fanatismo sectario, poder cambiar ellas solas la correlación de fuerzas negativa en la que nos encontramos, desdeñando cualquier unidad de acción con otros colectivos análogos
En estas circunstancias, para ANDALUCÍA COMUNISTA, PCPA y PTA se hace hoy más necesario que nunca poner de relieve la necesidad de la unidad frente a la división y la dispersión. Es necesario que entendamos que, sin la unidad de todas las fuerzas que luchan por la autodeterminación de Andalucía y por la liberación social de sus clases populares, es imposible no ya triunfar sino ni tan siquiera avanzar hacia ello. Pero la unidad no es una amalgama sin principios sino que debe ser partiendo de principios claros y debe plantearse en torno a objetivos concretos que, en el actual momento histórico son, a nuestro entender:
1. Unidad sindical. En una situación de atentados diarios contra los derechos de los trabajadores, de incremento creciente de la explotación laboral y de desorganización sindical, como producto de la labor del sindicalismo conciliador, es hoy más necesario que nunca un proceso de convergencia sindical que sea capaz de avanzar hacia la unidad de acción, el apoyo mutuo y el intercambio de experiencias entre los sindicatos de clase reivindicativos que rechacen el caudillismo por un lado y el entreguismo por el otro. En torno a esta idea queremos plantear iniciativas y estamos dispuestos a escuchar cualquier idea o propuesta al respecto.
2. Unidad electoral. Los comunistas andaluces saludamos el nacimiento de ANDALUCÍA EN MARCHA como proyecto de movimiento político y social de izquierda, de obediencia estrictamente andaluza, y llamamos al resto de fuerzas políticas andaluzas partidarias de la autodeterminación de Andalucía a integrarse en pie de igualdad con los colectivos que ya forman parte de él. Desdeñar la oportunidad histórica que tenemos en esta ocasión, por mor de alianzas oportunistas o por egoísmo miope y partidista, no va a impedir el éxito a largo plazo de ANDALUCÍA EN MARCHA pero, que duda cabe, sí que lo retrasará ya que no podemos obviar que todas las manos y todos los cerebros son necesarios para un proyecto tan audaz como este.
3. Unidad de los comunistas. Para los comunistas de ANDALUCÍA EN MARCHA es ahora más necesario que nunca el máximo de unidad de los marxista-leninistas andaluces y, por ello, persistiremos tanto en el proceso de unidad entre las tres organizaciones como en los contactos y actos en común con otras organizaciones comunistas de nuestra tierra.Siguiendo este camino de unidad y lucha estamos seguros de que el pueblo andaluz recuperará el espíritu del 4 de Diciembre y de que, esta vez sí, conseguiremos erradicar las trabas políticas, sociales y culturales que mantienen a nuestra nación en la actual realidad de pobreza, paro y subdesarrollo.
¡VIVA ANDALUCÍA LIBRE Y SOCIALISTA!
¡VIVA EL 4 DE DICIEMBRE!
¡POR LA UNIDAD DEL PUEBLO TRABAJADOR ANDALUZ!